Fallece el exministro bilbaíno Juan Manuel Eguiagaray a los 79 años

Eguiagaray formaba parte del grupo de socialistas vascos que tras la muerte de Franco se aupó a la cúpula del PSOE gracias a la 'alianza' que se construyó entre los miembros del PSE y los jóvenes abogados sevillanos capitaneados por González y Guerra que habían desplazado a la vieja guardia del partido. Junto con otros dirigentes como Joaquín Almunia o Ramón Jáuregui sentaron las bases del partido en Euskadi.

Licenciado en Derecho y en Ciencias Económicas por la Universidad Comercial de Deusto, ingresó en el Partido Socialista en 1977, y a partir de ahí desempeñó varios cargos internos y públicos. Fue concejal en el Ayuntamiento de Bilbao, diputado por Bizkaia, parlamentario vasco... En septiembre de 1988 fue nombrado delegado del Gobierno en la Región de Murcia, cargo que ocupó hasta diciembre de 1989, momento en el que fue nombrado para el mismo puesto en el País Vasco.

De trato afable, educado, Para entonces ya había sido elegido para formar parte de uno de los intentos más serios que se abrieron en esa época para acabar de forma dialogada con la violencia de ETA. Junto a Rafael Vera, formó parte de la delegación que el Gobierno de Felipe González envió a Argel a primeros de 1989. Los dos dirigentes socialistas se reunieron con Eugenio Etxebeste, 'Antxon', Belén González e Iñaki Arakama durante apenas dos meses. Aquellas conversaciones no llegaron a ningún lado y la banda terrorista siguió su actividad. Años más tarde, Eguiagaray aseguró que aquellos contactos no tuvieron ningún contenido político.

El 12 de marzo de 1991 fue nombrado Ministro de Administraciones Públicas en sustitución de Almunia. Y dos años después accedió a la cartera de Industria, donde tomó el relevo de otro vasco, Claudio Aranzadi. Bajó su mandato se puso en marcha el Plan Prever para intentar renovar la flota automovilística española, un proyecto que sirvió para impulsar la industria del sector y modernizar un parque de coches que estaba anticuado.

Tras dejar la política activa en 2002, ocupó diversos cargos en sociedades públicas, empresas y fundaciones. Aunque dejó la primera línea, nunca dejó de estar vinculado a un partido sobre cuyos militantes mantuvo un importante ascendiente. Apoyó de forma activa a Patxi López en su llegada a Ajuria Enea y no ocultó su tristeza por la situación que se vivía en el PSOE tras el convulso comité federal de octubre de 2016 que se saldó con la salida de Pedro Sánchez de la Secretaría General. En las primarias celebradas meses después expresó su apoyó a López. En declaraciones a EL CORREO mostraba su deseo de que se abriese «paso el sentido común». «Estamos dando una respuesta inadecuada a una sociedad más moderna de lo que es el PSOE, un partido glorioso pero que ha perdido su conexión con la sociedad». A su juicio, el exlehendakari socialista era la mejor opción para liderar el PSOE porque «Susana (Díaz) y Pedro (Sánchez) han sido protagonistas de batallas perdidas».

Buen conversador y amante del mar, en 2019 se embarcó en una aventura para tratar de emular a Magallanes y Elcano a bordo de un velero que pretendía dar la vuelta al mundo para «estrechar lazos y llevar lejos la imagen de una España abierta». El barco salió de Sevilla en agosto y la travesía se esperaba que iba a prolongarse durante tres años en varias etapas. Sin embargo, el covid acabó por paralizar el proyecto y el barco quedó paralizado durante meses en Perú.

Las muestras de afecto hacia Eguiagaray han sido numerosas. Además de Pedro Sánchez, la delegada del Gobierno en el País Vasco, Marisol Garmendia, le ha recordado como «un gran servidor público» y «un ejemplo de compromiso». Eneko Andueza, por su parte, ha destacado su contribución a «hacer un país mejor» a través de «la honestidad, la entrega y el trabajo».