Del sueño a la pesadilla en 14 minutos

Porque los rojiblancos tuvieron hasta tres claras ocasiones para ponerse por delante en la primera media hora de partido. La tuvo Berenguer en el minuto 7, con un remate que despejó Onana. La tuvo Iñaki Williams con un remate de cabeza que se fue fuera y después la volvió a tener Berenguer, con un disparo que golpeó en un defensa. El equipo fluía y la presión adelantada incomodaba al United. Entonces, ¿qué le sucedió al Athletic entre el minuto 30 y el descanso?

A veces el fútbol tiene cosas tan sorprendentes como la que sucedió en el primer gol del United. Nadie esperaba -igual ni él mismo- que Maguire apareciera reconvertido en extremo derecho para romper por dos veces la cintura de Jauregizar y colocar un caramelo en forma de centro que tras una peinada permitió a Casemiro batir a Agirrezabala. Fue una acción tan inesperada, y tan aislada, en el desarrollo del encuentro que al Athletic le sentó fatal. No debe ser fácil ver cómo tu rival se adelanta en la eliminatoria sin hacer prácticamente nada hasta entonces y cuando has realizado un derroche de energía como el que había hecho el Athletic hasta entonces.

A partir de la media hora y del primer gol del Manchester United, todo lo que podía salir mal, salió mal. El Athletic quedó muy tocado, el United olió sangre y se lanzó en busca del segundo, que llegó en una jugada confusa donde el árbitro y el VAR tuvieron un papel fundamental. Ernest Eskas no vio nada, pero fue llamado a consulta para valorar el agarrón de Vivián y decretó penalti y además expulsión del central, sin que antes viera una posible mano de Garnacho. Un cúmulo de decisiones en contra que se tradujeron en el segundo gol del United, porque el portugués Bruno Fernandes no es un futbolista que acostumbre a desaprovechar este tipo de regalos.

Valverde movió ficha tras el 0-2 en el minuto 36 para tratar de solucionar la expulsión de Vivián. Dio entrada a Paredes por Berenguer, que estaba siendo uno de los futbolistas más peligrosos del Athletic, pero la marcha del navarro creó un espacio por el centro donde el United supo colarse. Con el equipo desordenado, Ugarte y Bruno Fernandes conectaron para que el portugués colocara el 0-3 en el marcador en el minuto 44. Y pudo ser todavía peor porque Mazraoui remató al larguero en el último minuto del descuento de la primera mitad.

Valverde vuelve a ajustar a su equipo al paso por vestuarios. Da entrada a Prados por Galarreta, retrasa a los hermanos Williams a una línea de cuatro junto a los dos pivotes y deja en punta a Maroan. Pero lo fundamental es que el Athletic renuncia a presionar al Manchester United y se agrupa en su campo, esperando una oportunidad para salir a la contra que no llegó en toda la segunda mitad.

Por si las cosas no estaban ya complicadas para el Athletic, las decisiones arbitrales tampoco le ayudaron en la segunda parte. En una de sus escasas salidas, Maguire agarró a Maroan en una acción que se podía considerar como expulsión porque el delantero rojiblanco encaraba la portería de Onana. Pero el VAR no consideró que era una jugada de roja.

Con el Athletic ya muy fatigado por el esfuerzo, el United buscó el cuarto gol, pero se encontró con un Agirrezabala que sostuvo a los rojiblancos en la recta final del encuentro. Los de Valverde lo intentaron, pero no hubo forma de reducir la diferencia.