Basauri pedirá ser declarada zona tensionada de vivienda

Basauri se acogerá a la declaración de zona tensionada de vivienda para poder controlar el precio de los alquileres dentro de sus barrios y acabar con las subidas disparadas. El equipo de gobierno, formado por PNV y PSE, ha anunciado este miércoles que, tras valorar los resultados arrojados por el diagnóstico de vivienda encargado hace unos meses, ha decidido utilizar la herramienta prevista en la ley estatal aprobada en 2023. El siguiente paso será elaborar un plan con medidas específicas.

Una vez completado este requisito y tras remitir al Gobierno vasco la documentación necesaria, Basauri seguirá los pasos de Galdakao, Barakaldo y Bilbao. La localidad de la Margen Izquierda fue declarada en su totalidad zona tensionada a principios de abril. Le siguió Galdakao, aunque sólo en el barrio de Aperribai, único distrito del municipio que cumplía los requisitos. Y la capital vizcaína se sumará a esta lista previsiblemente en julio. Por su parte, Sestao ha iniciado los trámites para pedir la declaración con el encargo de un diagnóstico sobre la situación del mercado de la vivienda en la localidad.

El Gobierno vasco ha elaborado un listado de municipios que pueden ser susceptibles de ser declarados zonas tensionadas atendiendo a si cumplen uno de estos dos criterios: que el coste medio de la hipoteca o el alquiler más los gastos básicos superen el 30% de los ingresos familiares o que la vivienda se haya encarecido en los últimos cinco años tres puntos por encima del IPC. El último informe publicado por el Ejecutivo autonómico señala que estas localidades son, además de las cuatro mencionadas que se encuentran en distintas fases del proceso, Balmaseda, Berango, Bermeo, Derio, Elorrio, Erandio, Ermua, Gorliz, Lekeitio, Portugalete, Santurtzi, Sondika, Sopela y Urduliz.

En el caso de Basauri, la renta media de los hogares se sitúa en 34.724 euros, frente a los 40.787 euros de los municipios del Gran Bilbao. Y los precios de los hogares se ha incrementado un 37% respecto a 2017. Sin embargo, sigue costando menos vivir en la localidad —tanto en el caso de la compra como en el de los alquileres— que en cualquier otra del Gran Bilbao. En lo que respecta a las rentas mensuales, la media se sitúa en 688 euros, frente a los 773 del promedio de municipios de más de 5.000 habitantes. Esto convierte en un atractivo a la cabecera de la comarca de Nervión-Ibaizabal «generando una presión de la demanda sobre la reducida oferta», apuntan fuentes del Ayuntamiento.

Los precios más bajos y las conexiones en transporte público con Bilbao y otras zonas de Bizkaia también están teniendo un impacto en la demanda de viviendas protegidas. El estudio municipal señala que el volumen de población de fuera del municipio que solicita uno de estos hogares es muy elevado. De las 3.555 solicitudes de vivienda protegida contabilizadas a final de 2024, un total de 2.080 pertenecen a personas o unidades de convivencia empadronadas en Basauri mientras que 1.475 solicitudes, un 41% del total, se corresponden con personas o familias no empadronadas en la localidad.

Basauri ya ha adoptado medidas en los últimos años para tratar de aliviar la presión sobre la vivienda. Cuenta con 259 hogares que forman parte de programas de movilización de pisos vacíos como Bizigune y ASAP, que permiten, temporalmente, que residencias deshabitadas pasen a formar parte del parque de vivienda asequible en alquiler. «Se ha hecho un importante trabajo y hay ámbitos cuyo desarrollo en alquiler se encuentran ya conveniados con el Gobierno vasco y con el Estado (Azbarren y Basconia), se prevén diversas medidas normativas que se pondrán en marcha para ampliar el conjunto de herramientas de que dispondrán los ayuntamientos para mejorar la oferta de vivienda asequible en las zonas tensionadas, por lo que sería recomendable poder acogerse a ellas», ha declarado el alcalde, Asier Iragorri (PNV).

Fuentes municipales también han señalado los potenciales beneficios que tendría la declaración de zona tensionada para los propietarios. Entre ellos, las bonificaciones en el IBI para quienes alquilen por debajo del índice de referencia y las deducciones en el IRPF para fomentar el alquiler a largo plazo y a precios asequibles. Asimismo, han resaltado que obtener esta categorización permitiría «alcanzar acuerdos con el Gobierno vasco de manera preferente, y así acometer las actuaciones asociadas a la promoción de viviendas en alquiler».

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