Aperribay: «La policía nos dice que los nuestros estaban tranquilos, que no era una quedada»

Jokin Aperribay sugiere que los aficionados de la Real Sociedad heridos por arma blanca y trasladados al hospital fueron objeto de un ataque inesperado por parte de ultras de la Lazio y afirma que no se trató de una «quedada», de algo pactado, por cuanto los 'realzales' se encontraban «tranquilos» y en una zona de Roma muy alejada a la habitual de los radicales laciales. El presidente txuri-urdin realizó este mediodía una primera valoración tras visitar a los dos seguidores guipuzcoanos todavía ingresados, Aitor e Iker, sobre cuyo estado no quiso explayarse, aunque están fuera de peligro. Se interpreta como buena señal que pudiera dialogar con los dos durante la jornada del jueves, aunque uno de ellos se encuentra más grave y la previsión es que sea operado en las próximas horas.

Aperribay juzgó como «hechos terribles» los acaecidos en Roma durante la noche del miércoles en un pub irlandés cercano al Coliseo de Roma, a resultas de los que nueve aficionados de la Real Sociedad fueron heridos y dos de ellos continúan ingresados. «Nos tenemos que basar en la información que recibimos de la policía. Y nos dicen que los nuestros estaban tranquilos, que no esperaban semejante avalancha, que fue una situación sobrevenida y que, tras hacerles un seguimiento durante toda la tarde, no se les veía en modo pelea».

Lo que los heridos les han contado es que «era una calle no muy amplia, que estaban desperdigados, que no estaban preparados para una pelea, me dicen que hubo mucho ruido y mucho humo y personas que se abalanzaron sobre ellos para comenzar esa pelea o ese ataque». Confirma el presidente que «sí hubo armas blancas» y nueve heridos que «recibieron asistencia médica» y de ellos, «dos siguen hospitalizados y uno necesitó más tiempo pero ya no lo está». Sostiene el presidente que colaborará al máximo con la policía para encontrar y detener a los culpables, «sean quienes sean».

«La policía nos dice que los nuestros estaban tranquilos, que no esperaban semejante avalancha, que fue una situación sobrevenida y que, tras hacerles un seguimiento durante toda la tarde, no se les veía en modo pelea»

Aperribay no pide, de momento, sanciones para la Lazio, ni sabe si hay miembros de otras aficiones, como la de la Roma, implicados en estos hechos. Incidió mucho en que las víctimas de la violencia de los ultras locales vivieron una «situación repentina donde hubo 'bombas de pirotecnia'», que sufrieron «un abordaje» y que no se encontraban en el «lugar habitual» de los radicales biancocelestes. Y lo ilustró significando que es como si estuvieran tomando algo en la Plaza de Ferrerías y los aficionados más peligrosos se encontraran normalmente en la Parte Vieja. El club también ha subrayado que condena y no tolera la presencia de este tipo de aficionados radicales representando a la Real Sociedad.

Aperribay presentó su cruzada contra la violencia en el fútbol, que la Real ha vivido en los últimos años: «No quiero hablar de pasado, sino de futuro; hay que terminar con estas situaciones sean donde sean, en San Sebastián, Roma o San Petersburgo», afirma. Cree que están todos implicados en esta lucha y matiza que «pensar que la seguridad está en manos de los clubs es ir muy lejos». Por todo ello, invita a hacer «una reflexión» y, por supuesto, espera que las investigaciones den su fruto y que «los culpables tengan las penas que puedan resultar».

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