Primer día del nuevo Cercanías de Álava: «Más barato, más frecuencias... ¡mucho mejor!»

«Más frecuencias, más barato... ¡mucho mejor!», coreaba al unísono un grupo de estudiantes procedentes de la Llanada que pasadas las ocho de la mañana bajaban corriendo de uno de los vagones para encaminarse a sus centros escolares dentro de un convoy bastante lleno.

Ese servicio que cargado de autoridades políticas ejerció de viaje inaugural solo llevaba un viajero de los que conocen bien la línea, pues habitualmente se desplaza desde la estación de Dato a Lapuebla de Arganzón. «Lo suelo coger para ir al pueblo y en esta dirección no suele venir mucha gente. Era una necesidad importante porque es cierto que estaba bastante escaso de frecuencias y ahora nos va a dar más juego», destacaba Carlos Risaguas.

ara comprobar las novedades del servicio y pulsar a sus usuarios, además del viaje oficial EL CORREO también se subió a mediodía a un tren con rumbo a Alsasua. Los estudiantes, sobre todo los residentes en Agurain, eran los grandes protagonistas.

«Es una gozada porque ahora tenemos mucha más libertad a la hora de volver a casa», decía June Arellano, alumna de Sagrado Corazón. Una idea en la que incidía Eñaut López de Aberasturi, estudiante de Historia:«Muchas veces tenía que volver en autobús, que es casi una hora, y en tren estamos en 20 minutos y además al lado de la universidad».

La estudiante de Enfermería Nahia Berasategui suele desplazarse habitualmente en coche porque «las conexiones entre la estación y Txagorritxu no son rápidas», pero ha sido usuaria durante muchos años del tren y ve claro que una necesidad es mejorar el problema de los retrasos: «Tenías siempre la incertidumbre de no saber si ibas a llegar y eso desanima. Con más opciones de horarios se le abre la puerta a gente que igual no le cuadraba y podrá dejar el coche en casa».

El convoy está ya casi prácticamente vacío, pero hasta Araia llegaba Juan Carlos Ruiz de Gordoa, que tenía cita con el dentista y acude un par de veces al mes a la capital: «La ampliación de horarios es una mejora absoluta porque antes no teníamos este servicio a mediodía y había que esperar hasta las tres».

Desde Alsasua encaramos el viaje de vuelta. Elisa Iglesias se dirigía a su puesto de trabajo en Miranda de Ebro y reconoce que «aunque tenía flexibilidad en los horarios, el cambio me viene de maravilla, sobre todo porque este tren es bastante rápido».

En Agurain accede al tren Susana Cámara, que iba de camino a su trabajo en la Casa de Cultura vitoriana y que no duda en calificar como «fenomenal» el nuevo servicio. «Hace un año ampliaron la línea de autobuses, pero se tarda muchísimo más tiempo. Ahora solo hace falta que la gente se anime». Y, de paso, le ponía deberes a las administraciones:«Tienen que mejorar la conexión de Álava con Gipuzkoa, que solo tenemos tres al día».